sábado, 6 de julio de 2013

APARIENCIA Y SIMULACIÓN HUMANA

Cuanta gente viene al mundo y pasa la vida entera escenificando el guión de honesto, honrado, sincero, ético, moral y en la vida práctica y real, todo es una farsa. Por cierto, la palabra persona significa etimológicamente: mascara utilizada por un personaje teatral.

Los vemos serios, responsables y confiables. Les admiramos y respetamos porque nos dan confianza y seguridad para creer en ellos. Lamentablemente, los humanos creemos en todo sin cuestionar.

Más aun, ellos se convierten en modelos o patrones de conducta a seguir e imitar. Los hay de todas las profesiones y dedicaciones: militares, políticos, diplomáticos, jueces famosos, artistas de cine, empresarios, banqueros, religiosos de alta jerarquía, presidentes, reyes y paremos de contar. Sin embargo, muchos de ellos no son lo que aparentan; ellos tienen un disfraz y una máscara que esconde la verdadera naturaleza de lo que son, para hacerle sentir a la gente que son dignos y confíen en ellos. El colmo de los colmos es hablar de preservación de la naturaleza y asesinar a un espectacular animal (podría ser un elefante, una ballena, un tigre….).

Los observamos a diarios por las calles, en lugares públicos, en la tele, en el congreso, en los bancos, en los periódicos, en las arengas políticas antes de las elecciones, dentro de las grandes empresas y por todos lados. En la vida cotidiana es lo normal. La hipocresía es el nombre correcto y preciso.

Los vemos muy a menudo y no nos damos cuenta. La apariencia hace la diferencia.

En la naturaleza, muchos animales sobreviven mediante el mimetismo; en la vida humana muchos sobreviven por las mascaras psicológicas y disfraces conductuales.

La diferencia extra ordinaria entre las criaturas de la naturaleza y el ser humano es que los animales lo utilizan únicamente hasta el límite de lo necesario para sobrevivir, en cambio el ser humano debido al ego, codicia y ambición lo utiliza de manera ilimitada y abusiva para explotar al infinito y, engañar al prójimo, haciéndole creer lo que no es.

Muy a menudo muchos de estos personajes que alardean y presumen como pavos reales de todas sus supuestas virtudes caen en desgracia porque algunos se dedican a desenmascarar a estos tipejos, por el interés que sea. De esta manera han caído en desgracia total y execrados de la sociedad: directores de fondos monetarios internacionales, presidentes, jueces de alto rango, personajes de la realeza de algún país, artistas de fama mundial y uno que otro banquero (saben cuidarse muy bien porque tienen dinero para asesorías).

El mensaje que trata de transmitir este articulo es que el mundo social en el cual vivimos no es lo que uno cree ver y que los seres humanos estamos inmersos en un mar de hipocresías. Muchos tontos lo creen todo y otros están al acecho para aprovecharse de los tontos.

Todo esto vendría a ser como la ecología social humana y la lucha por la supervivencia; con la diferencia con respecto al mundo animal, que el ingrediente ego contiene la codicia y la ambición, que son infinitos y sin medida.

Cito una sentencia interesante relacionada con este articulo .


 “El secreto de la vida es la honestidad y el juego limpio, si puedes simular eso, lo has conseguido”

Groucho Marx